Análisis Currículo LOMCE

En primer lugar... ¿qué es exactamente el currículo?

La LOMCE, actual ley educativa (Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa) entiende por currículo la regulación de los elementos que determinan los procesos de enseñanza y aprendizaje para cada una de las enseñanzas.

¿Qué objetivos se trabajan relacionados con la Asignatura de Lengua Castellana y Literatura?

Podemos observar a lo largo del currículo que hay múltiples objetivos relacionados con la competencia comunicativa. En este caso, me ceñiré al Decreto 89/2014 por el que se establece el currículo primaria para la Comunidad de Madrid.

Una competencia se podría definir, ciñéndonos al propio documento legal, como "combinación de habilidades prácticas, conocimientos, motivación, valores éticos, actitudes, emociones, destrezas, aptitudes y otros componentes sociales y de comportamiento que se movilizan conjuntamente para lograr una acción eficaz".

El objetivo principal de la etapa que recoge esta competencia es el siguiente:

e) Conocer y utilizar de manera apropiada la lengua castellana y, si la hubiere, la lengua cooficial de la Comunidad Autónoma y desarrollar hábitos de lectura.

Si bien se puede percibir la competencia comunicativa de manera intrínseca en otros como por ejemplo:

c) Adquirir habilidades para la prevención y para la resolución pacífica de conflictos, que les permitan desenvolverse con autonomía en el ámbito familiar y doméstico, así como en los grupos sociales con los que se relacionan

f) Adquirir en, al menos una lengua extranjera, la competencia comunicativa básica que les permita expresar y comprender mensajes sencillos y desenvolverse en situaciones cotidianas.

Las TIC en el currículo

Otras reflexiones que se nos podrían plantear son las referentes al uso de las TIC en la enseñanza de la lengua y literatura. El propio documento menciona como herramientas importantes los diccionarios (físicos o digitales) así como el empleo de procesadores de texto, pero... ¿únicamente esas dos herramientas recoge todas las necesidades y conocimientos que demandan tanto la sociedad como nuestros alumnos y alumnas?

A título personal considero que, atendiendo a las necesidades educativas del alumnado y al avance exponencial que sufren las TIC cada año, no se recogen en su totalidad las necesidades y conocimientos del alumnado (en realidad, lo que se observa en el currículo no deja de ser una explicación ambigua y arcaica respecto al uso de las tecnologías, sin detallar herramientas, aplicaciones y finalidades concretas).

Si bien es cierto que en un apartado posterior dedicado exclusivamente al uso de las TIC se habla de recaudar información y poder emplearlas para hacer trabajos y demás proyectos, así como dejan claro que deben ser un medio de consulta y aprendizaje, me parece que sí que se necesita un planteamiento más amplio y globalizador, una referencia a las mismas que refleje la necesidad imperiosa que hay por trabajar a través de las TIC y enseñar cómo emplearlas, sacándoles el mayor provecho.

¿Es que acaso sólo podemos emplear los procesadores de texto para enseñar Lengua?

Soy consciente de la dificultad de reflejar en el documento marco, como es el currículo, todas las herramientas que se podrían emplear; sin embargo, valoraría muy positivamente la mención de otros programas de presentaciones, vídeos, collages... que permitan al alumnado desenvolverse en cualquier medio de comunicación verbal o no verbal de manera digital.

Atendiendo a todo lo anterior, es importante en este punto preguntarnos cuáles serán las dificultades a las que se pueden enfrentar tanto los docentes como los propios centros e incluso las familias a la hora de incorporar las TIC a las aulas.

En primer lugar, una de las dificultades más claras será la falta de recursos en centros públicos para poder ofrecer un ordenador a cada alumno/a del centro.

No obstante, estos últimos años el surtir a todos los colegios de estos materiales tecnológicos se ha posicionado como un objetivo principal, y por ello han aumentado drásticamente el número de dispositivos. Sin embargo, disponer de los recursos técnicos no es suficiente, también es importante aludir a la formación de los propios docentes en el uso de estas tecnologías, pues si su aprendizaje se basó en versiones muy previas a la actual de algún programa, o incluso el alumnado, al ser nativo-digital, conoce más de internet que el propio docente, pueden solaparse conocimientos y evitar así el dinamismo en el aula.

Por último, deberíamos tener siempre presente el principio de la igualdad de oportunidades. El uso de las TIC debe desarrollarse en el aula, evitando delegar este aprendizaje exclusivamente en el ámbito doméstico, ya que no todas las familias podrán facilitar dispositivos a sus hijos e hijas. Así, trataremos de que este factor afecte en la menor medida posible al rendimiento y proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes.

Ya para finalizar... hemos hablado de currículo, educación y objetivos. Pero... ¿qué hay de mi? ¿qué opinión me merece la organización curricular de mi formación actual? ¿Considero que es apropiada para afrontar las futuras peticiones que el centro podrá hacerme como maestra de Primaria?

Por ahora estoy, en líneas generales, contenta con mis estudios en la Facultad de Educación. Sí que es cierto que echo en falta una mayor presencia de prácticas en los estudios o de formación digital, el Plan de Estudios y la variedad de asignaturas me parece muy acertados.

Considero que la teoría educativa sí que la tenemos bastante trabajada, más que por el plan de estudios individual de cada asignatura, por el plan general de nuestra doble titulación. Y esto sucede ya que, si bien es cierto que dentro de las materias que se nos presentan hay un apartado reconocido de "prácticas", dentro de las mismas de manera generalizada no se ven cargadas de una gran importancia.

Los inconvenientes de mi formación podría agruparlos todos en la falta de prácticas y el estar lejos de un aula, aprendiendo realmente desde “primera fila” como quien dice. No obstante, las ventajas de mis estudios hasta el momento creo que residen en tener un campo de conocimiento muy amplio que nos permite considerar varias y diversas metodologías y encontrar aquellos recursos que consideremos más óptimos para afrontar los diversos conflictos que puedan surgir a nuestro alumnado.

Además, pese a que la formación digital no sea el punto fuerte del Plan de Estudios de mi Doble Grado, considero que las circunstancias del curso en el que nos encontramos han provocado forzosamente que tengamos que trabajar en nuestras competencias digitales y que, de manera autónoma, hayamos podido mejorar muchas de nuestras destrezas.