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Análisis y modificación de una actividad gramatical.

  • Foto del escritor: Marina Duarte Romero
    Marina Duarte Romero
  • 28 dic 2020
  • 4 Min. de lectura

Actualizado: 28 ene 2021

Como ya he mencionado en algunas entradas anteriores, el análisis, la observación y la comparación de recursos didácticos es crucial para que podamos extraer conclusiones que nos permitan renovar y mejorar nuestra metodología docente. De esta manera, podremos seleccionar aquellos materiales que consideremos más apropiados, tras un balance crítico de las ventajas e inconvenientes que posea.


No obstante, hemos de tener presente la posibilidad de modificar, alterar y complementar algunas actividades que determinados manuales nos ofrecen.

Esto nos permitirá ajustarnos a las necesidades concretas que nuestro alumnado precise, además de enfocarnos en aspectos que consideremos más relevantes.

Así, como profesionales de la educación no nos encontraremos limitados por un simple libro de texto, pero tampoco nos encontraremos perdidos, pues podremos seguir estos materiales como un índice, una guía o un complemento que podremos ir retocando a nuestro gusto.

Es por ello que, complementando el análisis de la entrada anterior, en esta ocasión vamos a analizar y modificar una actividad gramatical concreta de otro manual.


En esta ocasión, el libro de texto con el que vamos a trabajar está dirigido a 6º curso de educación primaria, de la editorial Santillana.

  • En primer lugar, localizaremos una actividad de gramática que pensemos que puede ser sujeta a modificaciones.

Sin tener la necesidad de indagar exhaustivamente en sus páginas, me topo con una actividad que reconocí como bastante sencilla y, a su vez, aburrida.

He de destacar que la sencillez de una actividad muchas veces no es un aspecto que se posicione en contra de la misma. De hecho, si complicamos demasiado algún ejercicio es probable que el resultado predominante que obtengamos por parte del estudiantado sea frustración, incomodidad o desagrado. No obstante, esta actividad es bastante escueta y, bajo mi punto de vista, simplifica en exceso el trabajo con sustantivos y adjetivos.

Es por ello que trabajé, junto a un par de compañeras, en la modificación y alteración de la misma para, sin dejar de lado los contenidos que se trabajaban, provocar que resultase en una actividad algo más dinámica y enriquecedora.

  • A continuación, vamos a determinar unos objetivos de aprendizaje para la actividad:

- Identificar sustantivos a partir de una imagen.

- Complementar los sustantivos con tres adjetivos.

- Posicionar en un correcto orden bajo un marco coherente los sustantivos y adjetivos trabajados.

- Trabajar de manera efectiva en equipo para obtener como resultado un texto escrito.


En definitiva, un correcto reconocimiento y uso de los sustantivos y adjetivos, así como su relación en un texto escrito nutrido de las aportaciones grupales.

  • Organización del alumnado:

El trabajo cooperativo presenta multitud de beneficios, pues permite una interacción entre el alumnado así como trabajar valores de respeto, ayuda y escucha.

Es por ello que para la organización del alumnado, en especial para actividades cortas que se llevan a cabo en el aula, siempre prefiero trabajar en parejas o pequeños grupos, tratando de que se complementen las ideas de cada alumno/a con los de sus compañeros y compañeras.

  • Pasos de la actividad:

En primer lugar organizaríamos los pequeños grupos de trabajo.

A continuación, el alumnado recibirá las instrucciones: inventar una historia en la que tenga que incluir los tres sustantivos, a los que tendrán que incluir tres adjetivos.

Esta historia será desarrollada por escrito y no deberá tener una extensión superior a una cara. La narración puede ser presentada en la modalidad textual que elijan, aunque el formato de cuento podría ser el más sencillo.

Por último, será recitada al resto de la clase y se compartirán impresiones tanto del trabajo personal como del trabajo realizado por el resto de compañeros y compañeras.

  • Producto o resultado final de la actividad:

El resultado que obtendríamos SIN la modificación serían tres frases independientes en las que se incluyen los nombres y tres adjetivos característicos.

No obstante, el resultado final obtenido con la modificación lo compondrá una historia coherente previamente elaborada con un compañero/a o un grupo, que engloba los tres sustantivos brindados así como su correspondiente adjetivación.

En ambos casos se habrían trabajado los contenidos gramaticales; sin embargo, en la actividad alterada estarán siendo integrados en un texto global y coherente, que además ha sido elaborado por más de una persona, lo que ha conllevado de manera indirecta un desarrollo de la comunicación oral y la competencia comunicativa.


  • Evaluación de la actividad:

Para evaluar la actividad se podrá emplear el recurso que el docente considere más apropiado. Al ser una actividad de clase no considero necesaria la elaboración de métodos de evaluación complejos tales como una rúbrica.

Es por ello que con un cuaderno de clase donde se dejen escritas algunas anotaciones de la clase podrá ser suficiente.

Los aspectos que serán evaluados podrían ser: la originalidad de las intervenciones, la coherencia en la utilización de los tres adjetivos, el correcto trabajo en grupo (escucha activa, aportación de ideas...) y una estructura de historia apropiada (introducción, nudo y desenlace).



¿Qué opinas de esta modificación?

Te animo a que le des una vuelta de tuerca a algunas de las actividades de los manuales que se emplean en tu centro; seguro que de esta manera puedes dar respuesta a muchas de las necesidades que te surgen tanto a ti como a tus alumnos y alumnas al trabajar con ellos.


No olvides comentar tus impresiones. ¡Nos leemos en la próxima entrada!

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